Hay quien quiere aprender Nordic y necesita que sea martes o jueves a las 7:00 de la tarde o fines de semana, solo el sábado., porque el domingo comen con la familia o tienen un curso intensivo...
Todo agendado hasta la felicidad.
Toca ser feliz de tal hora a tal hora.
No hemos aprendido que la vida cobra sus prerrogativas. Que la enfermedad no aparece cuando te viene bien.
Que el bienestar no depende de la hora que te interese. Que aparte de tu vida, también transcurre la de otros.
El Nordic es muy versátil permite realizarlo cuando te apetezca. Pero los beneficios sociales y emocionales dependen del contacto con la gente.
Obligan a cambiar tu sistema de valores.
No es cuando te viene viene bien, sino cuando le viene bien, al grupo de forma genérica.
Nos obliga a hacer un pequeño esfuerzo y situar y ordenar lo que es importante.
Cada día tenemos que pensar que es lo importante.
- ¿Es importante el ejercicio? Concédele un tiempo.
- ¿Es importante el ejercicio compartido ? Concédele el tiempo que le interesa a todos.
Amóldate porque vale la pena. Unas veces te vendrá bien y otras menos bien, pero al final suma. Es como cuando sales a caminar, y no te apetece en ese momento. Al final te alegras…!
Tengámoslo en cuenta. Hagamos pequeños esfuerzos que luego obtienen recompensas, no esperadas.
Rompamos la agenda.
Busquemos reordenar en función de lo verdaderamente importante.
Siempre se ha hecho así, el problema es, que ahora, queremos abarcarlo todo... Pensamos que somos infinitos.
Y sin embargo, no lo somos.
Por Francisco Guerrero Frias.
Médico de familia, prescriptor y Afa Coach